Usted Martín Santomé   no sabe cómo querría tener yo ahora todo el tiempo del mundo   para quererlo pero no voy a convocarlo   junto a mí ya que aún en el caso de   que no estuviera toda muriéndome entonces moriría  sólo de aproximarme a   su tristeza. Usted Martín Santomé no sabe cuánto he luchado por   seguir viviendo cómo he querido vivir   para vivirlo porque me estoy muriendo,   Santomé. Usted, claro, no   sabe  ya que nunca se lo   he dicho ni siquiera en esas noches en que usted   me descubre con sus manos incrédulas y libres usted no sabe cómo yo valoro su sencillo coraje de   quererme. Usted Martín Santomé   no sabe y sé que no lo sabe porque he visto sus   ojos despejando la incógnita del   miedo. No sabe que no es   viejo que no podría   serlo en todo caso allá usted   con sus años yo estoy segura de   quererlo así. Usted Martín Santomé no sabe qué bien, que lindo dice   Avellaneda de algún modo ha inventado mi nombre con su   amor. Usted es la respuesta que   yo esperaba  una pregunta que nunca he formulado usted es mi   hombre y yo la que abandono usted es mi   hombre y yo la que   flaqueo Usted Martín Santomé   no sabe al menos no lo sabe en   esta espera qué triste es ver cerrarse la   alegría sin previo   aviso de un brutal   portazo. Es raro pero siento que me voy alejando de usted y de   mí que estábamos tan cerca de mí y de   usted. Quizá porque vivir   es eso es estar cerca y yo me estoy muriendo Santomé no sabe usted qué oscura qué lejos qué callada Usted Martín Martín... ¿cómo era? los nombres se me caen yo misma me estoy   cayendo usted de todos   modos no sabe ni   imagina qué sola va a quedar mi muerte sin su  vida.  |   
Bienvenidos a la página Literaria de Julie Paola Lizcano Roa. Aquí, podrán encontrar recopilación de textos de todo tipo de literatura, así mismo algunos textos de la creadora de este blog!
sábado, 25 de diciembre de 2010
Ultima noción de Laura (Mario Benedetti)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario