sábado, 16 de junio de 2012

PARA LLORAR (Vicente Huidobro)





Es para llorar que buscamos nuestros ojos
Para sostener nuestras lágrimas allá arriba
En sus sobres nutridos de nuestros fantasmas
Es para llorar que apuntamos los fusiles sobre el día
Y sobre nuestra memoria de carne
Es para llorar que apreciamos nuestros huesos y a la muerte sentada junto a la novia
Escondemos nuestra voz de todas las noches
Porque acarreamos la desgracia
Escondemos nuestras miradas bajo las alas de las piedras
Respiramos más suavemente que el cielo en el molino
Tenemos miedo

Nuestro cuerpo cruje en el silencio
Como el esqueleto en el aniversario de su muerte
Es para llorar que buscamos palabras en el corazón
En el fondo del viento que hincha nuestro pecho
En el milagro del viento lleno de nuestras palabras

La muerte está atornillada a la vida
Los astros se alejan en el infinito y los barcos en el mar
Las voces se alejan en el aire vuelto hacia la nada
Los rostros se alejan entre los pinos de la memoria
Y cuando el vacío está vacío bajo el aspecto irreparable
El viento abre los ojos de los ciegos
Es para llorar para llorar

Nadie comprende nuestros signos y gestos de largas raíces
Nadie comprende la paloma encerrada en nuestras palabras
Paloma de nube y de noche
De nube en nube y de noche en noche
Esperamos en la puerta el regreso de un suspiro
Miramos ese hueco en el aire en que se mueven los que aún no han nacido

Ese hueco en que quedaron las miradas de los ciegos estatuarios
Es para poder llorar es para poder llorar
Porque las lagrimas deben llover sobre las mejillas de la tarde

Es para llorar que la vida es tan corta
Es para llorar que la vida es tan larga

El alma salta de nuestro cuerpo
Bebemos en la fuente que hace ver los ojos ausentes
La noche llega con sus corderos y sus selvas intraducibles
La noche llega a paso de montaña
Sobre el piano donde el árbol brota
Con sus mercancías y sus signos amargos
Con sus misterios que quisiera enterrar en el cielo
La ciudad cae en el saco de la noche
Desvestida de gloria y de prodigios
El mar abre y cierra su puerta
Es para llorar para llorar
Porque nuestras lágrimas no deben separarse del buen camino

Es para llorar que buscamos la cuna de la luz
Y la cabellera ardiente de la dicha
Es la noche de la nadadora que sabe transformarse en fantasma
Es para llorar que abandonamos los campos de las simientes
En donde el árbol viejo canta bajo la tempestad como la estatua del mañana

Es para llorar que abrimos la mente a los climas de impaciencia
Y que no apagamos el fuego del cerebro

Es para llorar que la muerte es tan rápida
Es para llorar que la muerte es tan lenta

EL PASO DEL RETORNO (Vicente Huidobro)




A RAQUEL,  Que me dijo
un día: «Cuando tú te
alejas un solo instante,
el tiempo y yo lloramos»

Yo soy ese que salió hace un año de su tierra
Buscando lejanías de vida y muerte
Su propio corazón y el corazón del mundo
Cuando el viento silbaba entrañas
En un crepúsculo gigante y sin recuerdos

Guiado por mi estrella
Con el pecho vacío
Y los ojos clavados en la altura
Salí hacia mi destino

Oh mis buenos amigos
¿Me habéis reconocido?
He vivido una vida que no puede vivirse
Pero tú Poesía no me has abandonado un solo instante

Oh mis amigos aquí estoy
Vosotros sabéis acaso lo que yo era
Pero nadie sabe lo que soy
El viento me hizo viento
La sombra me hizo sombra
El horizonte me hizo horizonte preparado a todo 

La tarde me hizo tarde
Y el alba me hizo alba para cantar de nuevo

Oh poeta esos tremendos ojos
Ese andar de alma de acero y de bondad de mármol
Este es aquel que llegó al final del último camino
Y que vuelve quizás con otro paso
Hago al andar el ruido de la muerte
Y si mis ojos os dicen
Cuánta vida he vivido y cuánta muerte he muerto 
Ellos podrían también deciros
Cuánta vida he muerto y cuánta muerte he vivido

¡Oh mis fantasmas! ¡Oh mis queridos espectros! 
La noche ha dejado noche en mis cabellos
¿En dónde estuve? ¿Por dónde he andado? 
¿Pero era ausencia aquélla o era mayor presencia?

Cuando las piedras oyen mi paso
Sienten una ternura que les ensancha el alma
Se hacen señas furtivas y hablan bajo:
Allí se acerca el buen amigo
El hombre de las distancias
Que viene fatigado de tanta muerte al hombro 
De tanta vida en el pecho
Y busca donde pasar la noche

Heme aquí ante vuestros limpios ojos
Heme aquí vestido de lejanías
Atrás quedaron los negros nubarrones
Los años de tinieblas en el antro olvidado 
Traigo un alma lavada por el fuego
Vosotros me llamáis sin saber a quién llamáis
Traigo un cristal sin sombra un corazón que no decae
La imagen de la nada y un rostro que sonríe
Traigo un amor muy parecido al universo
La Poesía me despejó el camino 
Ya no hay banalidades en mi vida
¿Quién guió mis pasos de modo tan certero?

Mis ojos dicen a aquellos que cayeron
Disparad contra mí vuestros dardos
Vengad en mí vuestras angustias
Vengad en mí vuestros fracasos
Yo soy invulnerable
He tomado mi sitio en el cielo como el silencio

Los siglos de la tierra me caen en los brazos 
Yo soy amigos el viajero sin fin
Las alas de la enorme aventura
Batían entre inviernos y veranos
Mirad cómo suben estrellas en mi alma
Desde que he expulsado las serpientes del tiempo oscurecido

¿Cómo podremos entendernos?
Heme aquí de regreso de donde no se vuelve
Compasión de las olas y piedad de los astros
¡Cuánto tiempo perdido! Este es el hombre de las lejanías
El que daba vuelta las páginas de los muertos
Sin tiempo sin espacio sin corazón sin sangre
El que andaba de un lado para otro
Desesperado y solo en las tinieblas 
Solo en el vacío
Como un perro que ladra hacia el fondo de un abismo

¡Oh vosotros! ¡Oh mis buenos amigos! 
Los que habéis tocado mis manos 
¿Qué habéis tocado?
Y vosotros que habéis escuchado mi voz 
¿Qué habéis escuchado?
Y los que habéis contemplado mis ojos 
¿Qué habéis contemplado?

Lo he perdido todo y todo lo he ganado 
Y ni siquiera pido
La parte de la vida que me corresponde
Ni montañas de fuego ni mares cultivados
Es tanto más lo que he ganado que lo que he perdido 
Así es el viaje al fin del mundo
Y ésta es la corona de sangre de la gran experiencia
La corona regalo de mi estrella 
¿En dónde estuve en dónde estoy?

Los árboles lloran un pájaro canta inconsolable 
Decid ¿quién es el muerto?
El viento me solloza
¡Qué inquietudes me has dado!
Algunas flores exclaman
¿Estás vivo aún?
¿Quién es el muerto entonces?
Las aguas gimen tristemente
¿Quién ha muerto en estas tierras?
Ahora sé lo que soy y lo que era
Conozco la distancia que va del hombre a la verdad
Conozco la palabra que aman los muertos
Este es el que ha llorado el mundo el que ha llorado resplandores

Las lágrimas se hinchan se dilatan
Y empiezan a girar sobre su eje.
Heme aquí ante vosotros
Cómo podremos entendernos Cómo saber lo que decimos
Hay tantos muertos que me llaman
Allí donde la tierra pierde su ruido
Allí donde me esperan mis queridos fantasmas
Mis queridos espectros
Miradme os amo tanto pero soy extranjero
¿Quién salió de su tierra
Sin saber el hondor de su aventura?
Al desplegar las alas
Él mismo no sabía qué vuelo era su vuelo

Vuestro tiempo y vuestro espacio
No son mi espacio ni mí tiempo
¿Quién es el extranjero? ¿Reconocéis su andar?
Es el que vuelve con un sabor de eternidad en la garganta
Con un olor de olvido en los cabellos
Con un sonar de venas misteriosas
Es este que está llorando el universo
Que sobrepasó la muerte y el rumor de la selva secreta
Soy impalpable ahora como ciertas semillas
Que el viento mismo que las lleva no las siente
Oh Poesía nuestro reino empieza

Este es aquel que durmió muchas veces
Allí donde hay que estar alerta
Donde las rocas prohíben la palabra
Allí donde se confunde la muerte con el canto del mar
Ahora vengo a saber que fui a buscar las llaves
He aquí las llaves
¿Quién las había perdido?
¿Cuánto tiempo ha que se perdieron?
Nadie encontró las llaves perdidas en el tiempo y en las brumas 
¡Cuántos siglos perdidas!

Al fondo de las tumbas
Al fondo de los mares
Al fondo del murmullo de los vientos
Al fondo del silencio
He aquí los signos
¡Cuánto tiempo olvidados!
Pero entonces amigo ¿qué vas a decirnos?
¿Quién ha de comprenderte? ¿De dónde vienes?
¿En dónde estabas? ¿En qué alturas en qué profundidades?
Andaba por la Historia del brazo con la muerte

Oh hermano, nada voy a decirte
Cuando hayas tocado lo que nadie puede tocar 
Más que el árbol te gustará callar.

Lisa: Roberto Bolaño






Cuando Lisa me dijo que había hecho el amor
con otro, en la vida cabina telefónica de aquel 
almacén de la Tepeyac, creí que el mundo
se acababa para mí. Un tipo alto y flaco y
con el pelo largo y una verga larga que no esperó 
más de una cita para penetrarla hasta el fondo.

No es algo serio, dijo ella, pero es
la mejor manera de sacarte de mi vida.
Parménides García Saldaña tenía el pelo largo y hubiera
podido ser el amante de Lisa, pero algunos
años después supe que había muerto en una clínica 
psiquiátrica
o que se había suicidado. Lisa ya no quería
Acostarse más con perdedores. A veces sueño 
con ella y la veo feliz y fría en un México
diseñado por Lovecraft. Escuchamos música
(Canned Heat, uno de los grupos preferidos
de Parménides García Saldaña) y luego hicimos
el amor tres veces. La primera se vino dentro de mí,
la segunda se vino en mi boca y la tercera, apenas un hilo
de agua, un corto hilo de pescar, entre mis pechos. Y todo
en dos horas, dijo Lisa. Las dos peores horas de mi vida,
dije desde el otro lado del teléfono. 

jueves, 5 de abril de 2012

Invisible (Mario Benedetti)





La muerte está esperándome 
ella sabe en qué invierno 
aunque yo no lo sepa 

por eso entre ella y yo 
levanto barricadas 
arrimo sacrificios 
renazco en el abrazo 
fundo bosques que nadie 
reconoce que existen 
invento mis fogatas
quemo en ellas memorias
tirabuzón de humo
que se interna en el cielo

por eso entre ella y yo
pongo dudas y biombos
nieblas como telones
pretextos y follajes
murallones de culpa
cortinas de inocencia
así hasta que el baluarte
de cosas que es mi vida
borre la muerte aleve
la quite de mis ojos
la oculte y la suprima
de mí y de mi memoria

mientras tanto
ella espera.

Palabras por la lectura (José A. Gómez)

Se puede...

leer para pasar el rato o leer para aprovecharlo
leer para recordar o leer para olvidar
leer para huir o leer para encontrarse
leer para amar y leer para odiar
leer para releer o leer para no leer más
leer para crear o leer para destruir
leer para pensar y leer para desconectar
leer para aprendery leer para desaprender
leer para ensimismarse o leer para compartir
leer para ocultarse o leer para mostrarse
leer para perderse o leer para encontrarse
leer para diferenciarse y leer para identificarse
leer para reafirmarse o leer para contradecirse
leer para crecer y leer para sentirse pequeño
leer para ganar tiempo y leer para perderlo
leer para contemplar o leer para vivir
leer para divertirse y leer para aburrirse
leer para informarse o leer para aturdirse
leer para después expresarse o leer para callar
leer por necesidad y leer por placer
leer por querer vivir o por estar harto
leer por pasión o leer por convicción
leer por imitar o leer por innovar
leer por obedecer y leer por rebeldía..

AFORISMOS

1. Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú. Donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú. Donde haya un esfuerzo que todos esquivan, hazlo tú. Sé tú el que aparta la piedra del camino. (Grabiela Mistral)

2. Ese jardín encantado quizá haya sido para el niño feliz, el que está descubriendo el mundo. Pero quise sacar a luz también al niño infeliz, al niño melancólico. Yo le digo a la gente, ¿tu niño está triste? Déjalo estar, está creciendo. Pequeñas memorias tiene un epígrafe que dice "déjate llevar por el niño que has sido". Tengo tan presente a ese niño como si yo fuera por ahí llevado por él, de la mano. (José Saramago)

3. Quizá la obra educativa que más urge en el mundo sea la de convencer a los pueblos de que su mayores enemigos son los hombres que les prometen imposibles. (Maeztu de Ramiro)

4. Los hombres no son nada, los principios lo son todo (Benito Juárez)

5. Vivimos sólo de nuestros pobres, bellos, y magníficos sentimientos, y cada sentimiento que lastimamos es una estrella que apagamos. (Hermann Hesse)

6. La mente creativa ama aún cuando no hay razón para amar, es feliz cuando no hay razón para serlo, crea donde aparentemente no hay posibilidades de crear, y construye un cielo en la desesperación del infierno (
Sangharakshit)
 



7. 
La paz no es solamente la ausencia de la guerra; mientras haya pobreza, racismo, discriminación y exclusión difícilmente podremos alcanzar un mundo de paz. (Rigoberta Menchú)

8. De todos los instrumentos del hombre, el más asombroso es, sin duda, el libro. Los demás son extensiones de su cuerpo. El microscopio, el telescopio, son extensiones de su vista; el teléfono es extensión de la voz; luego tenemos el arado y la espada, extensiones del brazo. Pero el libro es otra cosa: el libro es una extensión de la memoria y la imaginación. (Jorge Luis Borges)

9. Los libros son compañeros del solitario, amigos del desamparado, solaz del tedioso, contento del descorazonado y sostén del desvalido. (Orison Swett Marden)

10. La ternura y la amabilidad con los demás no son signos de debilidad o desesperación, sino manifestaciones de fuerza y decisión. (Gibran Kahlil Gibran)

11. Educad a los niños. Educadlos en la tolerancia, en la solidaridad. Transmitirle lo más importante que tenemos: la herencia cultural. (Aldecoa, Josefina 1997)

12. Adquirir el hábito de la lectura es construirse un refugio contra casi todas las miserias de la vida. (
William Somerset Maugham)



13. 
En la medida en que el sufrimiento de los niños está permitido, no existe amor verdadero en este mundo.
(Isadora Duncan)

14. Donde no hay libros hace frío. Vale para las casas, las ciudades, los países. Un frío de cataclismo, un páramo de amnesia. El libro es un seguro de vida, una pequeña anticipación de inmortalidad. (María Elena Walsh)

15. Protegedme de la sabiduría que no llora, de la filosofía que no ríe y de la grandeza que no se inclina ante los niños. (Gibran Khalil)

16. Por grandes y profundos que sean los conocimientos de un hombre, el día menos pensado encuentra en el libro que menos valga a sus ojos alguna frase que le enseña algo que ignora. (
Mariano José de Larra)
 

17. 
La tierra no es del hombre, el hombre es de la tierra. Produce una inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras el género humano no la escucha. (Victor Hugo)

18. La verdadera tragedia de los pueblos no consiste en el grito de un gobierno autoritario, sino en el silencio de la gente. (
Martin Luther King)
 

19.
El secreto de la genialidad es el de conservar el espíritu del niño hasta la vejez, lo cual quiere decir nunca perder el entusiasmo. (Aldous Huxley)

20.  La literatura es como un gran almacén. Se guardan en él todas las emociones humanas, nuestros sueños y nuestras preguntas, leer es entrar en ese almacén y tomar lo que necesitamos. El lector devuelve a la vida, a través de la lectura, lo que el escritor tomó de ella para escribir sus libros, con lo que el círculo se cierra. (G. Martín Garzo)

21. Por el grosor del polvo en los libros de una biblioteca pública, puede medirse la cultura de un pueblo. (John Ernest Steinbeck.)

22. Un bello paisaje, una hermosa jornada, un libro selecto... ¿Qué más necesitáis para ser felices? El sol resplandece por dentro. (Grabiela Mistral)

23. El medio mejor para hacer buenos a los niños es hacerlos felices. (Oscar Wilde)

24. Los libros son acogedores y nos permiten sobrellevar los exilios de los que se compone cada vida, nos permiten pensarlos, construir nuestras moradas interiores, inventar un hilo conductor para nuestras historias, considerarlas con humor, reescribirlas día a día. Y a veces nos empujan a atravesar océanos, llevados por el deseo y la fuerza de descubrir paisajes, rostros jamás vistos, otras tierras, donde otros encuentros serán quizás posibles. Abramos, por lo tanto, las ventanas; abramos los libros. (Michèle Petit)

25. El que lee mucho y anda mucho; ve mucho y sabe mucho. (
Miguel de Cervantes)

26.
Para educar a un niño hace falta la tribu entera (Proverbio africano)

27. La ternura es la columna central que sostiene la vida. (José Víctor Martínez Gil)

28. Libros, caminos y días dan al hombre sabiduría. (Proverbio árabe) 

29. Los derechos humanos son sus derechos. Tómenlos. Defiéndanlos. Promuévanlos. Entiéndanlos e insistanen ellos. Nútranlos y enriquézcanlos. . . Son lo mejor de nosotros. Denles vida. (Kofi Annan)

30. Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y lo aprendo. (
Benjamin Franklin)

31. 
La felicidad es interior, no exterior; por lo tanto, no depende de lo que tenemos, sino de lo que somos. (Henry Van Dyke)

32. El futuro de los niños es siempre hoy. Mañana será tarde. (Gabriela Mistral)

33. El amor es para el niño como el sol para las flores; no le basta pan: necesita caricias para ser bueno y ser fuerte. (Concepción Arenal)

34. El libro es fuerza, es valor, es poder, es alimento; antorcha del pensamiento, y manantial del amor. (Rubén Darío)

35. Sea lo que sea que puedas o sueñes que puedas, comiénzalo. Atrevimiento posee genio, poder y magia. Comiénzalo ahora. (Goethe)

36.La primera tarea de la educación es agitar la vida, pero dejarla libre para que se desarrolle (Maria Montessori)

37. La máquina del tiempo está hecha de palabras: se llama "literatura". La palabra nos transporta a través del tiempo: nos hace viajar por mundos que ya no existen. (Rubem Alves)

38. La cultura... esa gran desconocida en un país dominado por "sálvame". (Martin Bermejo Domínguez)

39. Nunca sabrás lo lejos que puedes llegar, hasta que no despliegues tus alas. (Mario Alonso Puig)

40. El objetivo de la educación es la virtud y el deseo de convertirse en un buen ciudadano (Platón)

41. El libro es la célula más importante del cerebro de la Humanidad, donde ésta va acumulando, de generación en generación, lo más valioso de su experiencia. (José Antonio Ramos y Aguirre)

42. No se plantan semillas de comida, se plantan semillas de bondades. Traten de hacer un círculo de bondades, estas los rodearan y los harán crecer más y más. (Irena Sendler)

43. La felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días. (Benjamin Franklin)

44. Nunca tuve una tristeza que una hora de lectura no haya conseguido disipar. (Montesquieu)

45. El futuro del mundo pende del aliento de los niños que van a la escuela. (El Tamud)

46. Todos nosotros sabemos algo. Todos nosotros ignoramos algo. Por eso, aprendemos siempre. (Paulo Freire)

47. En cuestiones de cultura y de saber, sólo se pierde lo que se guarda; sólo se gana lo que se da. (Antonio Machado)

48. La experiencia de la felicidad será importante en la educación cuando la escuela no esté al servicio del sistema productivo o de la infraestructura económica sino al servicio de la Vida. (José María Toro)

49. El gran libro, siempre abierto y que conviene esforzarse en leer, es el de la Naturaleza.(Antonio Gaudí)

50. La utilidad de los libros es que inspiran y ayudan al hombre para entender y descifrar su propio corazón. (Vicente Ferrer)

viernes, 23 de marzo de 2012

A Solas (Ismael Enrique Arciniegas)




¿Quieres que hablemos? Está bien empieza:
  Habla a mi corazón como otros días…
¡Pero no!… ¿qué dirías?
¿Qué podrías decir a mi tristeza?
…No intentes disculparte: ¡todo es vano!
Ya murieron las rosas en el huerto;
el campo verde lo secó el verano,
  y mi fe en ti, como mi amor, ha muerto.
Amor arrepentido,
ave que quiere regresar al nido
al través de la escarcha y las neblinas;
amor que vienes aterido y yerto,
  ¡donde fuiste feliz… ¡ya todo ha muerto!
No vuelvas… ¡Todo lo hallarás en ruinas!
¿A qué has venido? ¿Para qué volviste?
¿Qué buscas?… Nadie habrá de responderte!
Está sola mi alma, y estoy triste,
inmensamente triste hasta la muerte.
Todas las ilusiones que te amaron,
las que quisieron compartir tu suerte,
mucho tiempo en la sombra te esperaron,
y se fueron… cansadas de no verte.
Cuando por vez primera
en mi camino te encontré, reía
en los campos la alegre primavera…
todo era luz, aromas y armonía.
Hoy todo cuán distinto… Paso a paso
y solo voy por la desierta vía.
?Nave sin rumbo entre revueltas olas-
pensando en la tristeza del ocaso,
y en las tristezas de las almas solas.
En torno la mirada no columbra
sino esperanzas y páramos sombríos;
los nidos en la nieve están vacíos,
y la estrella que amamos ya no alumbra
el azul de tus sueños y lso míos.
Partiste para ignota lontananza
cuando empezaba a descender la sombra.
…¿Recuerdas? Te llamaba mi esperanza,
¡pero ya mi esperanza no te nombra!
¡No ha de nombrarte!…¿para qué?… Vacía
está el ara, y la historia yace trunca.
¡Ya para que esperar que irradie el día!
¡Ya para que decirnos: Todavía,
Si una voz grita en nuestras almas: ¡Nunca!